sábado, 26 de mayo de 2018

Reseña de: "El Tercer Durmiente"

Bueno, nuevamente vuelvo con los Raven Boys y, sinceramente, no podía venir más contenta.

Sí, sé que voy más lenta que un caracol y que estoy trayendo esta reseña cuando debería tener ya escrita la del cuarto libro (porque sí, ya he acabado esta saga); los exámenes finales, las graduaciones... todo ello me ha mantenido alejada y, ahora que tengo unos días de paz (porque empiezo ya a preparar selectividad) estoy intentando ponerme al día.

Sin nada más que decir vamos a empezar ya.

DATOS DEL LIBRO

  • Autor: Maggie Stiefvater.
  • Nº de páginas: 416 págs.
  • Encuadernación: Tapa blanda.
  • Editorial: EDICIONES SM.
  • Resumen: Hay tres durmientes. A uno hay que despertarlo. A otro hay que no despertarlo. El tercero no importa. ¿Cuál de ellos será el que han encontrado Blue y los chicos del cuervo?
    Blue Sargent ha encontrado muchas cosas. Por primera vez en su vida, tiene amigos en los que puede confiar, un grupo del que siente que forma parte. Los chicos del cuervo la han aceptado sin reservas; los problemas de ellos se han convertidoen los problemas de Blue, y al contrario. Pero hay algo malo en encontrar cosas: el daño que hace perderlas, y lo fácil que es que se desvanezcan. Así que Blue y los chicos siguen buscando. Mientras la idea de Glendower se cierne sobre ellos, cada vez más posible y cercana, los chicos del cuervo se enfrentan a la existencia de tres durmientes.A uno deben despertarlo. A otro deben no despertarlo. El tercero no importa. Entre viejas amistades que se deforman hasta convertirse en otras cosas y nuevas amistades de final profetizado; entre madres desaparecidas, cuevas malditas, doncellas delirantes, héroes asesinos y villanos de opereta, Blue continúa subúsqueda. Lo que nosabe es qué busca, exactamente. Pero eso no importa: aunque ella se equivoque, hay algo que la espera al final. Algo inevitable...

OPINIÓN PERSONAL

Resultado de imagen de el tercer durmiente
Tras el desastre que fue para mí leer La historia interminable fui con miedo a leer este tercer libro porque, como ya debéis saber, esta saga me está encantando y no quería estropearla por un mal periodo lector. Sin embargo no ha sido así, he sacado tiempo de donde he podido y la historia me ha mantenido enganchada siempre.
Como siempre, hablando del argumento en general debo decir que se acerca el final y se nota; este libro es según mi opinión el típico segundo libro de una trilogía, no aporta demasiadas cosas pero deja todo colocado para el desenlace final.

Y sí, la historia de Maura y su desaparición y todo el misterio y tensión que hay tanto con Greenmantle como con Glendower son muy buenas pero... dentro de la perfección no es de mis favoritos.
Y bueno, como siempre ésta es una novela de personajes y por tanto es necesario hablar de ellos y su evolución... tengo tanto que decir que espero que esto quede claro.
Empezando por Blue y Gansey tengo que decir que me tienen en un sin vivir, su relación aquí se hace latente a más no poder y la tensión se palpaba en cada una de sus escenas hasta el punto de hacerme querer más y más escenas de ellos dos juntos... Sin embargo, jugando con mis sentimientos, la autora nos deja en un sin vivir porque claro, todo puede destrozarse si el ship se hace real (un quiero y no puedo que me tiene de los nervios, vamos).
Sin embargo esa tensión no se queda en lo típico de vamos a introducir romance en una novela juvenil y, aunque ya se veía venir desde los otros libros, al ser en este donde más tensión existe es donde más se percibe que esos sentimientos son los que hacen a Blue y a Gansey crecer como personajes. Gansey consigue dejar a un lado esa muralla infranqueable y protectora por Blue y de esta manera vemos como se acerca el culmen del personaje pues, estoy segura, pronto podremos ver a un Gansey sin capas y ante todos (y será hermoso). Este es el Gansey que se puede considerar novio literario; un Gansey real y que, además muestras sus miedos... porque sí, todos sabíamos el problema de Gansey que puede ser fatal para él pero, gracias a este libro y a las experiencias que en él viven, se transmite esa sensación de pánico que simplemente deja los pelos de punta.
Sin embargo esa tensión no se queda en lo típico de vamos a introducir romance en una novela juvenil y, aunque ya se veía venir desde los otros libros, al ser en este donde más tensión existe es donde más se percibe que esos sentimientos son los que hacen a Blue y a Gansey crecer como personajes. Gansey consigue dejar a un lado esa muralla infranqueable y protectora por Blue y de esta manera vemos como se acerca el culmen del personaje pues, estoy segura, pronto podremos ver a un Gansey sin capas y ante todos (y será hermoso). Este es el Gansey que se puede considerar novio literario; un Gansey real y que, además muestras sus miedos... porque sí, todos sabíamos el problema de Gansey que puede ser fatal para él pero, gracias a este libro y a las experiencias que en él viven, se transmite esa sensación de pánico que simplemente deja los pelos de punta.

En cuanto a Ronan y Adam... Ronan no ha brillado tanto en este libro pero tampoco le hace falta, él sabe perfectamente como encandilar sin ser la estrella en el firmamento... y eso me encanta. Mi ship para él se confirma (al menos para mí, tengo miedo de que hará Maggie con ello) y no puedo estar más feliz por ello. Creo que Ronan merece una relación de verdad, quiero leer algo tipo Malec y siento que es muy posible si todos los acontecimientos dramáticos que en Henrietta suceden dejan. Sobre sus intenciones para el futuro... primero tengo que decir que me dejó bastante impactada descubrir la revelación que le hace a Adam, puede que mucha gente se lo oliera pero yo, no. Es por esto que necesito que él consiga su propósito y porque, siendo sinceros, sé que Ronan tiene demasiado potencial que mostrar todavía.

En cuanto a Adam, casi podría declararle protagonista de este libro. No estaba segura de ello hasta casi el final pero, una vez leí una reflexión por su parte de los hechos, me di cuenta de que él ha llevado el peso de la historia.
Por un lado está su trama con Ronan, de la que simplemente no puedo ser más fan; si los momentos Gansey-Blue me hacían querer más capítulos sobre ellos, estos dos me hacen querer libros enteros. Sin embargo aquí, al igual que con Blue, vemos una evolución enorme por parte de Adam sintiéndolo, por fin, un personaje que sí merece mi cariño. Lo siento cómodo por fin consigo mismo y dejando a un lado esas ambiciones tontas. Adam tuvo desde el principio un papel muy importante, un papel que hasta ahora no había acabado de asumir y que, ahora que lo ha hecho, puede dar lugar a un personajazo. De Adam espero que siga evolucionando así de bien, que, igual que con Blue, se note el peso de los acontecimientos finales del libro y que su papel sea tan relevante como nos quieren hacer creer porque, si las cosas siguen así, los eventos dramáticos se van a volver aún más dramáticos.
Y bueno, sé que me dejo personajes sin mencionar como Noah, quien ha perdido muchísima importancia en este libro pero, aunque me encantaba como personaje, siento que ha sido una decisión acertada por parte de la autora porque no sé qué podría aportar como personaje con más peso. También me dejo a Persephone y a Cala quienes me encantan y, aunque las siento perdidas sin Maura, eso contribuye a la trama de su desaparición de una forma muy gráfica; y por último también al Hombre de Gris, quien me enternece siendo casi la figura paterna para Blue.
Y bueno, nuevamente acabo la reseña quejándome de ese final, esta vez ya tengo el libro comprado y voy a empezarlo hoy mismo pero... ¿Cómo puede escribir ese epílogo y quedarse tan tranquila? Adoro esa tensión con la que, aunque la historia se haya cerrado genial y siguieras teniendo ganas de leerla, al escribir el epílogo hace que te desesperes por saber lo que sigue.

FRASE

¿Qué era besarse sin darse un beso?
Era un mantel que hay en retirada de un tirón bajo un banquete recién servido; un caos de contactos en unos segundos de confusión.
Dedos en el pelo, manos acariciando nucas, labios rozando mejillas, mentón es en peligrosa proximidad.

Puntuación del libro: 8'25/10.